EL SEX-SHOP DE LA 7ª AVENIDA (IL PORNOSHOP DELLA SETTIMA STRADA)

FICHA TÉCNICA
T.O: Il pornoshop della 7ª strada
/Pleasure Shop on 7th Avenue
Dir: Joe D' Amato
Año: 1978
País: Italia
Música: Bruno Biriaco
Cast: Anna Maria Clementi, Massimo Baratta, Ernesto Colli, Peter Outlaw, Kien Ho (Raquel De Guzman), Brigitte Petronio, Cristian Borromeo

REVIEW
Dos tipos asaltan una tienda de comestibles y huyen por la puerta de atrás, escapando por lo callejones, hasta que van a parar a un sórdido sex-shop regentado por una atractiva mujer. Sabiéndose perseguidos deciden ocultarse allí, a la espera de una mejor ocasión para salir de aquella zona con todo el dinero. Pronto sabrán que el negocio que atracaron está bajo la protección de un capo de la mafia local y que la chica del sex-shop a la que retienen y amenazan es novia del mafioso. Con la ayuda de un tercer compinche (un rudo afrocamericano) huyen de la ciudad, llevando como rehen a la chica del sex-shop que los conduce hasta un apartado chalet de las afueras.
Curiosa cinta del amigo Joe D'Amato inédita en España, lo que la convierte, al menos en la piel de toro, en toda una rareza. Pero rara también es su condición: un esbozo de Rape & Revenge donde se aborta la violación y la venganza. Como apunto en la sinopsis, dos rateros psicopáticos putean de mala manera a un jefe mafioso, robándole la pasta de sus negocios y secuestrando a su novia, de la que también se benefician sexualmente. Perseguidos por los hombres del boss deciden ocultarse en un chalet, donde a punta de pistola y navaja, también obtendran los favores carnales de las jóvenes inquilinas. Si bien hay coacciones y armas de por medio, las chicas casi no muestran reparos en entregarse a sus captores.
Esta suerte de sucedáneo puteril y minimalista del clásico de Wes Craven La última casa a la izquierda (Last house on the left, 1972), incluye algunos insertos hardcore (no demasiados y sin eyaculaciones) que D'Amato prometió a los actores sólo serían mostrados en el extranjero. Se usaron dobles o, como dicen en Italia, contrafiguras para los primeros planos de penetraciones y felaciones. Pero ya sea D'Amato o Franco Gaudenzi (propietario de la productora Kristal Film, también involucrada es los sexy-horror caribeños del director) incumpleron su palabra, provocando el enfado de los actores, principalmente de la protagonista Anna Maria Clementi y Brigitte Petronio que demandaron a la productora.
Con exteriores filmados en Nueva York e interiores en Roma (la parte del chalet). D'Amato retrata New York a la manera que sólo él y otros italianos podían hacerlo. Firmando en la fotografia con su nombre real de Aristide Massaccesi, el director nos muestra antros, callejones, clubs nocturno, peep shows, cines porno y marquesinas donde se anuncian pelis como Tintorera o The Eyes of Laura Mars.
Dos tercios de la película transcurren en el chalet, donde hay situaciones y detalles que recuerdan mucho a la posterior pero más conocida Trampa para un violador (La casa sperduta nel parco/ House on the Edge of the park, 1980) de Ruggero Deodato... Por ejemplo,  partidas de poker, el encuentro sexual en la ducha, chicas con el pelo a lo chico, los roles que juegan los dos villanos principales y sobre todo la presencia de Christian Borromeo y Brigitte Petronio en ambas pelis. Como curiosidad final, apuntar que Joe D' Amato hace un guiño-homenaje a dos directores de culto del erotismo salvaje, uno más conocido  para el gran público, Russ Meyer, y el otro un maldito del cinema cult italiano, Alberto Cavallone. Al primero lo tiene presente en el personaje de Anna Maria Clementi, a la que llama Lorna como a la protagonista de la película pionera del subgénero roughie Lorna (1964). A Cavallone le toma prestada la escena del billar de El hombre, la mujer y la bestia (Spell-Dolce mattatoio, 1977), cuando uno de los secuestradores, Ernesto Colli, se divierte sádicamente lanzando con el taco las bolas a la vagina de Brigitte Petronio, espatarrada sobre el tapete verde de la mesa de juego.
  Review by Gerard Fernández Ordel

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